Asistir al International Astronautical Congress ha sido una de las experiencias más transformadoras de mi vida, y no hubiera sido posible sin el apoyo de la Universidad Católica Michel Velasco E. Gracias a ellos, pude cumplir este sueño y presentar mi trabajo ante expertos en el área, algo que no solo me llenó de orgullo, sino que cambió totalmente mi perspectiva de vida. Este congreso me permitió entender de una forma más profunda cómo toda la ciencia se entrelaza. Lo que descubrimos en el espacio tiene aplicaciones directas aquí en la Tierra, y viceversa. Los avances tecnológicos y científicos que desarrollamos para la exploración espacial no solo benefician a los astronautas, sino que pueden mejorar la calidad de vida de muchas personas en nuestro planeta, como en el caso de la desmineralización ósea, que afecta tanto a los astronautas en microgravedad como a personas mayores y mujeres postmenopáusicas en la Tierra. Sin embargo, algo que me causó tristeza fue ver cuán pocos latinos, y sobre todo mexicanos, estábamos presentes en un evento tan importante a nivel internacional. A la vez, me llenó de orgullo ver cómo esos pocos latinos y mexicanos lucharon con tanto esfuerzo para salir adelante y representar a sus países con dignidad y pasión. Fue un recordatorio de que, aunque nuestro camino puede estar lleno de obstáculos, nuestras ganas de contribuir y de marcar una diferencia son inquebrantables. La oportunidad de conectar con otros profesionales apasionados por la ciencia y la innovación me mostró que, aunque a veces los retos parecen imposibles, la colaboración internacional y el trabajo en equipo pueden llevarnos muy lejos. Esta experiencia me ha reafirmado que el camino que elegí es el correcto, y me siento más comprometida que nunca a seguir investigando, aprendiendo y contribuyendo a este campo.

     

Katherine Luna

Directora de Salud espacial de UdeG Space